Hay 2 tipos de ecosistema de aguas dulces o continentales
Ecosistema de agua quieta o estancada:
Está conformada por lagos, lagunas, arroyos, ciénagas y pantanos. En las aguas estancadas los productores son organismos fotosintetizadores, tanto plantas como fitoplancton, constituido por una infinidad de seres microscópicos, como algas verdes, cianobacterias y diatomeas, que flotan cerca de la superficie. En la parte más profunda se acumula materia orgánica como hongos y bacterias, y seres del fango, como gusanos y almejas. Muchas aves, como las garzas y los patos, se alimentan de los
organismos acuáticos de estos ecosistemas.
Lagos: Un lago es un cuerpo de agua dulce o salada, de una extensión considerable, que se encuentra separado del mar. El aporte de agua a todos los lagos viene de los ríos, de aguas freáticas y precipitación sobre el espejo de agua.
Lagunas: Una laguna es un depósito natural de agua que está separado del mar y es de menores dimensiones sobre todo en profundidad que un lago, pudiendo sus aguas ser tanto dulces como salobres, y hasta saladas.
Pantanos: Un pantano es una capa de agua estancada y poco profunda en la cual crece una vegetación acuática que puede llegar a ser muy densa. La mayoría de las veces, el pantano ocupa, en un valle, la parte abandonada por las aguas de un río.
Ciénagas: Las ciénagas son depósitos de aguas no corrientes, con algún grado de conexión con el río, del cual depende la renovación de sus aguas e intercambio de materiales -sedimentos, solutos, coloides- y organismos -plancton, bentos y plantas vasculares.
Arroyos: Un arroyo, riachuelo o rivera es una corriente natural de agua que normalmente fluye con continuidad, pero que a diferencia de un río, tiene escaso caudal, que puede incluso desaparecer en la estación seca, verano o invierno, dependiendo de la temporada de lluvia para su existencia.